Lightnin' Guy: el bluesman que vino del frío

He de confesar que ,repasando los temas de Lightnin' Guy estos días atrás, me esperaba una correcta pero fría sesión de blues. ¿Un bluesman belga? venga hombre ..... seguro que es un tío gris y aburrido.

 Y además, ¿qué se puede esperar de un tipo que se presenta con una maleta de su abuela, seguro que de la Segunda Guerra Mundial,  de la que saca cables, púas, pedales, llena de cinta americana y esparadrapo, y la convierte en instrumento de percusión?, ¿qué se puede esperar de un belga que pretende hacer blues con una guitarra sacada de Mad Max y una especie de mandolina hecha a mano?

Pues lo que no me esperaba: que acabara haciendo mover el esqueleto y corear sus canciones a todo el personal que pudo ayer en el Café 66 y en el Hell Paso disfrutar con este grandísimo músico llegado del frío. Empezando por temas lentos, aquello empezó a tomar una temperatura considerable, hasta que nos hizo corear a capella "John the Revelator", con el regalo previo de un medley de temas clásicos de rock'n'roll de los '50.

Además de su pericia al slide, le acompaña una voz quebrada muy sugerente y se arrancó en un tema con la armónica, acompañado de Dani del Toro, gran armonicista con el que compartió varias canciones.

En el café 66 nos dedicó un tema "Winter blues" que, tal como nos dijo, describía el clima de su país: 13 meses de invierno (por favor, si alguien conoce el tema y el autor, que no es suyo, que nos lo diga). Pero a mí no me las da: este dicharachero y extrovertido bluesman no es belga, ni es frío, ni mucho menos gris.

Un acierto más de la programación que nos regala el café 66 y el Hell Paso, en el mejor de los ambientes. Hasta el propio Lightnin' Guy en mitad del concierto del café 66 dio las "gracias a Pedro, el dueño, por invitarle a tocar en un sitio tan acogedor en el que se sentía como en el salón de su casa, donde adornan las paredes fotografías de los más grandes. Prefería tocar en un sitio así, que en un gran estadio. Y si pudiera se llevaría este bar a su país". Ahí queda eso, de un tipo que se recorre toda Europa de garito en garito.

P.S.- Una lástima que la autoridad en lugar de perseguir chorizos, malversadores, políticos mangantes y corruptos, se dedique a tocar las narices porque a las 14:00 se oye música en un bar y hay dos motos en la acera.